Los malagueños,
segundos en la clasificación, aspiran a acabar con la imbatibilidad del equipo
moronense y asaltar el primer puesto.
Sin duda el plato fuerte de esta
9ª jornada de Liga EBA Grupo D será el partido que el próximo domingo, a partir
de la 1 de la tarde, enfrentará en el Pabellón Alameda de Morón al Aceitunas
FRAGATA y el Unicaja, el primero contra el segundo de la tabla. Los de Morón llegan
al choque invictos, acumulando 8 triunfos consecutivos, en tanto que los
malagueños lo hacen con un balance de 7 victorias y solo una derrota, anunciando
que lucharán por el título hasta el final de la competición.
El filial del Unicaja muestra a
las claras la filosofía de cantera del club costasoleño, incorporando a sus
filas jóvenes jugadores andaluces y extranjeros que presentan una proyección más
que prometedora. Entre los primeros sobresalen los bases malagueños Francisco
Alonso (líder de su equipo en minutos jugados y anotación, 5º del grupo con 16’7
pp), y Enrique Cortés (el segundo en minutos jugados), junto al granadino Carlos
Corts y otro malagueño, el alero José Alberto Jiménez. En cuanto a los foráneos,
son varios los nombres que destacan, sobre todo el alero congoleño Romaric Belemene
(2’02 metros), el ala-pivot serbio Kenan Karahodzic (2’09 m) y el pivot Senegales
Bruno Diatta (2’08 m, a la sazón su máximo reboteador), habituales tanto en los
partidos de EBA, como en los de Adecco Oro del vinculado Clínicas Rincón. No se
queda ahí la cosa, y si es por altura el equipo Unicaja también cuenta con el pivot
congoleño Viny Okouo (2’14 m).
El técnico moronense Amador
Miranda, consciente de la importancia del choque, ha apelado esta semana a la
intensidad defensiva de los suyos para contrarrestar el poderío físico y de
altura que presentan los malagueños. Su equipo ha estado ya dos partidos al
borde del precipicio (ante Bball 66-68, y Cajasol 69-71) cuando se olvidan las
señas de identidad que lo caracterizan, y no quiere que vuelva a suceder.
Una imagen del partido frente a Cajasol de la pasada semana |
El primero de la tabla, invicto,
frente al segundo, que no conoce la derrota como visitante. Buen partido para
disfrutar de baloncesto, en el que se espera la afición moronense vuelva a llenar
el Alameda como en las grandes ocasiones.
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